sábado, 15 de febrero de 2014

Nueve años de amor: no voy a decirte adiós, Catita



Fuiste la primera gatita que adopté; la primera en mi corazón, mi ángel, mi chiquitina, mi amor.
Cuando te vi por primera vez no me gustaste; yo esperaba una gatita más pequeña y guapa, y en cambio me encontré con vos: flacucha, casi seis meses, patitas largas y pelaje gris (más adelante te volviste atigradita y dorada). Para peor eras muy tímida y asustadiza. ¡Cómo nos costó a Ismat (tu madrina) y a mí sacarte del transportín cuando por primera vez te trajimos a casa!
Y la primera noche me diste un susto de muerte: aquel día me tocaba hacer el turno de noche en el trabajo –061–, y cuando regresé a las 8 de la mañana, no te encontraba por ninguna parte.
«¡Cati, Cati!» te llamaba desesperada, mientras sentía que el corazón se me iba a salir del pecho.
Me preguntaba: «¿Acaso había dejado una ventana abierta? ¿O te habías escabullido cuando abrí la puerta para salir la noche anterior?»
Te busqué como loca en el minúsculo apartamento que alquilaba en el barrio de Tetuán, hasta que se me ocurrió mirar dentro del armario de la ropa: y allí estabas, calladita y sin mover un pelo, hecha un ovillito entre las mantas apiladas en el fondo...
Me enseñaste a amarte con locura. Será por eso que ahora siento que tengo roto el corazón; y sabes que mi corazón ha pasado por muchos trances, pero nada como esto...
Chiquitina, angelito mío: no cambio el dolor inmenso que experimento ahora por nueve años sin tu luz y tu amor. Ellos valen la pena estas lágrimas, este desconsuelo.
Y no te digo adiós; no, mi vida. Tu cuerpecito descansa por fin; se deja abrazar por el aire y la tierra... Y tu ser, tu chispa amorosa permanece en mí, en mi memoria y en mi propia esencia, donde hay un eterno jardín con pastito fresco para que te tumbes al sol, mi Catita, mi angelito, mi amor.


(Catita nos dejó el jueves 13 de febrero del 2014) 






6 comentarios:

  1. FAbi! tengo mi gata, la Tona hace 10 años y a veces se me da por pensar en el momento en que me falte y como una boba me pongo a llorar... son animalitos que traen mucha luz, por lo menos asi ha sido en mi vida... además de los arañones, mi gata ha sido parte importante de mi vida y, aunque suene duro, ha estado ahí cuando muchos humanos no estuvieron...
    ánimo!

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    1. Muchas gracias Caro, coincido con vos en todo, Catita llenó de luz y amor incondicional mi vida, y sé que ahora me toca vivir este duelo, que es duro, pero sé que tengo un angelito conmigo para siempre... ¡Un beso grande!

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  2. Fabi mucho animo en estos momentos...Cati, cuantas veces oi hablar de esa gatita....como bien dices, has disfrutado estos años de ella. Un beso y arriba el animo

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    1. Muchas gracias Ana Rus, mi consuelo en este momento es el amor que he compartido con este ser pequeño y maravilloso. Un beso grande.

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  3. Fabi que decirte te comprendo tan bien, esas almas puras que tenemos la gran suerte de conocer y que nos enseñan a amar sin condiciones, a sentir hasta el más puro atisvo de viento y a disfrutar los rayos de sol en nuestros rostros.Hay una estrella más en el firmamento brillando fuerte con todo el amor que le diste tanto tu como tu pantera azul. Lo siento desde lo más profundo de mi Alma y Huma y Leo se unen desde los madriles a enviaron miles de ronroneos y por mi parte un fuerte y gran abrazo.

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    1. Muchas gracias cuore, sé que vos entendés lo que estoy pasando ahora... Mi panterita y yo la estamos llorando, sé que llegará un momento cuando la podré recordar sin tanto dolor como ahora, me siento en carne viva... Mi consuelo es el amor que hemos compartido, que no se acabará nunca, mi chiquitina vivirá siempre en mí y cuando me toque cruzar a la otra Orilla, allí me saldrá al encuentro con sus maulliditos y sus ronroneos... Un beso grande para tí y para tus chiquitines.

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